Paseando por el bosque de las hadas y los elfos
Las hadas fueron apagando el Sol lentamente
Susurraron una nana de viento a los arboles
y el rio no se quería dormir
Salió el Elfo, le cantó una nana y a dormir
Felices sueños
domingo, 13 de noviembre de 2011
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12 comentarios:
Están preciosos los bosques y baja manso el río. El Elfo parece feliz.
Saludos.
¡Qué hermoso lugar!
Salu2
Pero ¿qué hizo el Elfo, cantarle una nana al río, o tirarle una piedra? Je,je.
A ver si en lugar de dormirse, el río se desmayó de la pedrada...
jaja qué gracioso el Elfo!!!
El elfo es una preciosidad y seguro que tiraba piedras al río pues eso es lo que más le gusta a los elfos, aunque hay que tener cuidado pues detrás de las piedras se van los elfos la mayor parte de las veces.
Tejon, el bosque está espectacular y el rio todavía no acaba de correr del todo.
Juan Carlos, precisoso el sitio no extrañaria encontrarse con hadas...
Perikiyo: como sabes de los gustos de los pequeños elfos, será por que los tienes en casa, por cierto para cuando una historia, de esas tuyas, con elfos y hadas?????????
Cinexim, Pepe: El Elfo se hartó de tirar piedras y no, no fué detras de las piedras al agua, lo primero que hizo, antes de tirar piedras fué meter los pies en el agua...
No se por qué me da que este elfo más que cantar nanas revoluciona todo lo que tiene alredor... Que guapo (si, aunque no se le vea la cara, me le imagino)
Besos.
Por el NO a los ELFOS chamámoslles NETOS, jeje. Y soy fe de que nada hay tan mágico como su compañía en un paseo de finde por el bosque
Laura, si que los revoluciona, sí. Ya sabes lo que opino de que se les vea la cara a los niños, no soy muy partidario...
Amado, si quieres yo le llamo nieto pero la verdad es que fué bueno el paseo con mi hijo...
A este Elfo le cantas una nana y te duermes tú ántes.
No hace falta que se le vea la cara,los Elfos no se dejan casi de ver,corren que se las pelan,jajaj,besitos.
Cosas de la edad, rapaz!!!
Ana, ya te digo como corria el elfo, no dejó bicho tranquilo...
Amado, soy casi un rapaziño...
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