Hay días en que te levantas un tanto espeso, sin mucho ánimo, días que pueden ser perfectos o una perfecta castaña, esos días, lo notas, pueden ser de cualquier forma. si te pones a pensar mal, seguramente, las cosas se estropearan...
Sobre todo si te pones a pensar en todas las cosas mundanas y en todas las preocupaciones del día a día, Que montón de preocupaciones y responsabilidades para empezar el día y apenas acabo de levantarme.
Entonces empiezo a divagar y me doy cuenta de que debo seguir siendo como un niño, debo seguir fijándome en las cosas para poder sorprenderme y poder ver las señales que se me ponen delante, debo mantener la mente abierta y, por supuesto, los ojos.
Entonces miro al cielo y me encuentro mirando fijamente el lucero de la mañana, ya sé que tiene otro nombre, pero a mi padre le gustaba decirme que había estrellas y luceros y que de los luceros el mas bonito era el lucero de la mañana...
Pues bien me encuentro mirando fijamente el lucero de la mañana y me doy cuenta en ese momento que yo ya soy capaz de solventar esas situaciones, que tengo todos los medios para seguir adelante que solo necesito confiar en mi y en los míos...
Realmente solo necesito saber que:
"Dentro de mí estará todo"
"Tu eres nosotros"
2 comentarios:
Iba a comentar, pero llevo un rato pensando que ponerte...
Mi preciosa lunita...
¡Hasta el infinito y más allá!
uNA entrada preciosa Flores....y una inmejorable referencia en la vida, ese lucero....
Un abrazo
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